Dos poemas de Bob Kaufman


Eco doloroso



Los puros pequeños poros

En mi piel,

Millones de pequeñas

Tumbas secretas,

Llenas de muertos

 Sentimientos

Que no quedarán

Muertos.



Los peludos pequeños pelillos

Sobre mi cabeza,

Millones de pequeños

Arboles secretos,

Llenos de pájaros

Muertos,

Que no quedarán

Muertos.

Cuando muera,

No me quedaré

Muerto.



Trad. Zach Payne





Vagabundo celestial 



Por cada sueño recordado

Hay veinte vidas nocturnas. 



Bajo los multiplicados arcos del sueño

Existencias de zombie se transforman en la Existencia.  



En los rectángulos retorcidos de la noche   

Bañaderas tempestuosas de sexo flexible



Ya vienen preparadas, calientes. 

Cada día, confundido en posturas desesperadas,

Pierde su forma, frente a los prodigios dadaístas del negro 

Nunca hubo una noche que terminara 

O comenzara.  



Trad. Marcel Lueiro Reyes

Comentarios

Entradas populares